La propuesta de valor para inmobiliarias es un elemento clave en tu estrategia de captación de clientes y de diferenciación de la competencia. Solo con un mensaje claro y un cliente bien informado conseguirás destacar en un mercado saturado, donde los agentes profesionales se confunden con aficionados e incluso con particulares que realizan las operaciones por su cuenta.
Del mismo modo que los consumidores eligen vestir con una marca específica por cómo les hace sentir o compran productos en Amazon porque saben que el proceso será rápido y eficiente, quienes van a confiar en tus servicios como agente inmobiliario necesitan una razón para elegirte a ti
de entre toda la oferta que tienen disponible. Ese elemento diferencial es lo que se conoce como propuesta de valor.
Para encontrar eso que te hace único, no tienes que fijarte en una sola área de tu servicio, sino en varios aspectos. Si, por ejemplo, todos tus servicios son online o si te especializas en un único tipo de propiedad, como las viviendas sostenibles, tu valor añadido resaltará el tipo de servicio que ofreces. Sin embargo, cuando priorizas la velocidad, la transparencia o la cantidad de información, tu fortaleza se centrará en la experiencia.
En todos los casos, para que tu propuesta de valor funcione, tiene que ser algo que el cliente necesite o aprecie y que, además, no pueda encontrar en otro sitio. Por otro lado, es importante que la entiendas como un factor estratégico de tu negocio y que la comuniques siempre que tengas ocasión, ya que debes verla como una parte fundamental de tu identidad empresarial.
Te acabamos de mencionar que es imprescindible que tu valor añadido se relacione con algo que el cliente precise, pero tan importante como saber este detalle es que entiendas el porqué. Así, te resultará más fácil adoptar un punto de vista crítico ante las opciones que estés barajando.
Cuando prestas un determinado servicio, tu objetivo final es el de conseguir clientes interesados para que te paguen por él. Por eso sus necesidades y puntos de vista siempre tienen que estar en el centro de tu estrategia. Apuesta por soluciones a los desafíos inmobiliarios que existen ahora o innova con servicios que hagan el proceso de compraventa mucho más rápido y sencillo.
Si tus clientes no son capaces de entender cómo les beneficia tu propuesta de valor, tu
comunicación se diluirá en un mercado inmobiliario saturado. Necesitas sacarlos de la actitud
«eso mismo lo puedo hacer yo por mi cuenta y sin pagar» y atraer su atención dejando claro
cómo su vida va a ser más fácil si contratan tus servicios.
Por último, la confianza es el fundamento de toda relación. Necesitas que tu mensaje sea
claro y creíble. Da igual si puedes vender la casa de tus clientes en una semana, si ellos no
creen que seas capaz de hacerlo, la comunicación sobre tu propuesta de valor será
completamente ineficaz.
Como puedes ver, elegir lo que te hace diferente de los demás no es algo simple ni que debas hacer en cuestión de segundos. Es importante que te sientes a pensar en el funcionamiento real de tu inmobiliaria y quién es tu cliente tipo. Con estos dos detalles te resultará mucho más fácil identificar las necesidades y deseos reales que intentas satisfacer con tu trabajo.
¿Los vendedores te felicitan por la agilidad de trabajar contigo? Antes de comprar una casa, ¿recibes elogios por la cantidad y la calidad de la información que ofreces a los interesados? ¿La competencia intenta copiar la tecnología que utilizas para mostrar las propiedades online? ¿Tienes una habilidad particular para encontrar bienes raíces? Todos estos posibles atributos reúnen dos condiciones: atienden a necesidades reales de los clientes y son fáciles de entender.
Una vez que tengas identificados todos estos puntos, es el momento de empezar a redactarlos para utilizarlos en tu web, tu bio en las redes sociales y otras comunicaciones tanto físicas como virtuales. Encuentra una frase que te sirva como titular y que, en pocas palabras, sea capaz de plasmar por qué eres diferente del resto de inmobiliarias. Después, si lo consideras necesario, emplea otra oración que te ayude a contextualizar la primera.
Si, por ejemplo, gracias a tu forma de trabajar, los clientes pueden adquirir sus propiedades sin
tener que desplazarse, tu propuesta de valor podría quedar así: "Compra tu vivienda sin
moverte de casa. Gracias a nuestra tecnología, podrás ver las propiedades en remoto con todo
lujo de detalles".
Si aún no tienes claro cómo crear una propuesta de valor que haga que tu agencia inmobiliaria
destaque sobre el resto, te aconsejamos que eches un vistazo a la competencia. Sabiendo cómo se comunican y conociendo el tipo de servicio que prestan, podrás establecer paralelismos con tu realidad. Estos son algunos de los ejemplos que a nosotros nos han resultado más interesantes.
La proptech latinoamericana utiliza la tecnología y los algoritmos para ayudar a encontrar a sus usuarios lo que están buscando más rápidamente y mejorar su nivel de satisfacción. Por eso, como frase para comunicar su propuesta de valor han elegido: "La nueva forma de vender tu propiedad". Con esto consiguen subrayar su principal fortaleza: la innovación.
Esta agencia inmobiliaria es una de las compañías del sector con más solera. Su bagaje ha permitido a esta empresa catalana ser un referente y, además, sirve de garantía de satisfacción. Por eso, como titular para reflejar su propuesta de valor han escogido: "Forcadell, valor de confianza desde 1958".
Ahora que ya sabes por qué es importante una propuesta de valor para las inmobiliarias y cómo elaborarla, solo te queda ponerte manos a la obra y elegir la tuya. Escoge atributos que te diferencien de tus competidores y que sean de valor para los clientes. De este forma, conseguirás un posicionamiento de marca fuera de serie.